Artículo de Beatriz Cosgrove, fisioterapeuta especializada en suelo pélvico

Mi nombre es Beatriz Cosgrove, soy fisioterapeuta especializada en la reeducación del suelo pélvico desde hace 25 años.

Hace seis años tuve la suerte de poder recibir una formación que me cambió muchas de las cosas que me acompañaban en mi día a día puesto que como fisio de suelo pélvico que soy y con la formación que recibí en la universidad, nuestro trabajo era bastante analítico y muy focalizado en este grupo de músculos.

En la formación que nos impartió Joëlle Winkel, también fisioterapeuta,  nos enseñó a trabajar  de forma más global y con una herramienta que no me podía imaginar que me iba a cambiar tanto mi forma de trabajar con mis pacientes….parecerá una tontería, pero en aquel momento una pelota amarilla de unas características particulares entró en escena…

Empecé a trabajar con este balón para facilitar la flexibilidad y la adaptación de las articulaciones de las caderas en el entorno del embarazo y el parto…

Pero lo verdaderamente interesante es que hace dos años empecé a investigar y experimentar con una postura para la que todos estamos programados y que se ha borrado de nuestra rutina diaria: Las cuclillas…

¡Vaya! Parece que con esta introducción os iba a descubrir algo más mágico, sofisticado, complejo….

Pues es así de fácil, convivir con la posición en cuclillas es bueno para todo, para la espalda, para ir al baño bien (“El estreñimiento, el mal de nuestros días”) para mejorar nuestro suelo pélvico, para liberar toxinas…y unas cuantas virtudes más…

¿Y entonces?, si esta postura es tan buena…venga! vamos a ponernos todos en cuclillas el máximo posible…pues lamentablemente nuestras articulaciones de los tobillos, de las rodillas y de las caderas se han anquilosado un “poquito” y no podemos (la mayoría de nosotros) forzarlas a una postura tan exigente…Así, que aquí entra nuestra pelota amarilla en juego. Con este tamaño de bola (hemos estudiado muchas del mercado) y sus características de resistencia podemos facilitar la progresión a la posición de las cuclillas, desinflando la bola progresivamente y permitir que nuestro cuerpo vuelva a sentirse cómodo en la postura natural por excelencia.

Mi nombre es María Vila, también fisioterapeuta y licenciada en actividad física. Desde mi perspectiva de licencia en actividad física soy consciente de que la posición de cuclillas es fundamental en muchas actividades diarias y deportivas, y la capacidad para adquirir esta posición de manera correcta va a influir significativamente en la movilidad y la fuerza de diferentes grupos musculares y articulaciones. La metodología desarrollada por Beatriz para trabajar esta posición se ha demostrado eficaz para mejorar la movilidad y estabilidad de la región lumbo-pélvica, así como de las articulaciones de las caderas, rodillas y tobillos.

Como fisioterapeuta y licenciada en actividad física, he podido observar la notable mejoría en la ejecución de ejercicios que dependen en gran medida de la movilidad de estas áreas. Ejercicios como las sentadillas, el lunge, y el peso muerto, son componentes esenciales en la rehabilitación y el entrenamiento funcional. La metodología de Beatriz no solo optimiza la movilidad articular sino que también potencia la eficacia en el desarrollo de la fuerza y la estabilidad, lo que se traduce en una mayor eficiencia en el entrenamiento físico de los pacientes.

Este enfoque es especialmente relevante para aquellos pacientes que buscan mejorar su rendimiento en actividades deportivas o que necesitan una rehabilitación más efectiva. Al trabajar la posición de cuclillas de manera controlada y progresiva, se logra no solo la reeducación del movimiento, sino también la prevención de lesiones, ya que se fortalecen los grupos musculares que sostienen y protegen las articulaciones involucradas.

Desde el Centro de Fisioterapia pelviperineal Beatriz Cosgrove, todo el equipo, María, Alba, Paula y yo, os animamos a que mejoréis vuestra calidad de vida incorporando las cuclillas.

Visitar web Beatriz Cosgrove